BARCELONA. Señoras y señores, Ronaldinho ha hablado. Seis meses después de su última comparecencia ante los medios, ayer alzó la voz el brasileño. Eso sí, en un acto publicitario, que pagando la cosa cambia. «No soy cantante para estar con el micrófono todos los días», utilizó como justificante ante su ausencia continuada.
Por ser quien es, y por su reiterado mutismo, adquieren mayor relevancia sus declaraciones. En un acto que generó una expectación tremenda, Ronaldinho analizó su cuestionable estado de forma sin reconocer abiertamente su bajón. Dice el «10» del Barcelona que él está así por culpa de la falta de títulos colectivos: «Sigo siendo el mismo. La diferencia es que el año pasado no ganamos ningún título». Ahora bien, anuncia, tal y como hizo a principio de curso, que se deja la piel para volver a ser Ronaldinho: «Hay momentos en los que no salen las cosas, pero estoy trabajando para volver a mi mejor nivel».
Después de dejar de ser noticia su suplencia, y hastiada la afición de tantos capítulos con el brasileño como protagonista, Ronaldinho no está del todo satisfecho con su actual rol. «Ser suplente no es algo que pase por mi cabeza. Yo soy positivo y siempre me veo jugando. Esa es mi motivación de todos los días para ayudar al equipo, y creo que lo mejor que puedo hacer para ayudar al equipo es jugar los 90 minutos», sentenció. Un mensaje para Rijkaard, que ya no le considera imprescindible y que ante el Valencia en Copa, uno de los encuentros más importantes del año, le dejó en la grada.
El atacante reconoció que las críticas le duelen, aunque en parte las entiende ya que las cosas no van tan finas como antaño: «Cuando las cosas no salen bien, las críticas son normales y vienen las «cobranzas» -exigencias-. Molestar las críticas, molestan, es normal. A uno le gusta escuchar cosas buenas, pero es normal cuando no se ganan títulos», terció.
Por ser quien es, y por su reiterado mutismo, adquieren mayor relevancia sus declaraciones. En un acto que generó una expectación tremenda, Ronaldinho analizó su cuestionable estado de forma sin reconocer abiertamente su bajón. Dice el «10» del Barcelona que él está así por culpa de la falta de títulos colectivos: «Sigo siendo el mismo. La diferencia es que el año pasado no ganamos ningún título». Ahora bien, anuncia, tal y como hizo a principio de curso, que se deja la piel para volver a ser Ronaldinho: «Hay momentos en los que no salen las cosas, pero estoy trabajando para volver a mi mejor nivel».
Después de dejar de ser noticia su suplencia, y hastiada la afición de tantos capítulos con el brasileño como protagonista, Ronaldinho no está del todo satisfecho con su actual rol. «Ser suplente no es algo que pase por mi cabeza. Yo soy positivo y siempre me veo jugando. Esa es mi motivación de todos los días para ayudar al equipo, y creo que lo mejor que puedo hacer para ayudar al equipo es jugar los 90 minutos», sentenció. Un mensaje para Rijkaard, que ya no le considera imprescindible y que ante el Valencia en Copa, uno de los encuentros más importantes del año, le dejó en la grada.
El atacante reconoció que las críticas le duelen, aunque en parte las entiende ya que las cosas no van tan finas como antaño: «Cuando las cosas no salen bien, las críticas son normales y vienen las «cobranzas» -exigencias-. Molestar las críticas, molestan, es normal. A uno le gusta escuchar cosas buenas, pero es normal cuando no se ganan títulos», terció.
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